Barry Ardolf, de 46 años, es sentenciado a 18
años en una prisión federal por los deseos de venganza iniciados
por la denuncia de un matrimonio formado por Matt Kostolnik y
Bethany Kostolnik, los cuales en el año 2009 acusaron a Barry de
besar en la boca a su hijo de cuatro años.
Dicha denuncia por parte de este matrimonio causó la ira
de Barry, el cual robó la contraseña de la señal WiFi de
sus vecinos, y comenzó con su venganza, la cual constaría de
múltiples acciones ilegales en nombre de sus
vecinos.
Entre estas acciones cabe destacar la creación de una página
falsa de Myspace y varios correos falsos a nombre de Matt
Kostolnik. En dicha cuenta de Myspace colgó pornografía
infantil, la cual además fue enviada mediante la falsa
dirección de correo electrónico a los compañeros de trabajo de su
vecino.
Pero la cosa no terminó ahí, sino que también de dedicó a
amenazar la vida del vicepresidente de los EEUU,
Joe Biden, y a otros políticos. Esto alertó al servicio secreto,
que abrió una investigación contra los Kostolnik, y fueron
sometidos a una estricta vigilancia.
Uno de los múltiples mensajes de correo electrónico enviados a
Biden desde la falsa cuenta decía lo siguiente:"¡Juro por
Dios que te voy a matar!"
Kostolnik, por su parte, y ya desesperado, contrató a una
empresa de abogados y a un experto forense en computación, de esta
forma se pudo averiguar que era Barry Ardolf, su vecino, quien
estaba realmente detrás de los ataques.
La investigación llegó a manos del FBI, los cuales
registraron la casa de Barry, y encontraron las evidencias
necesarias para iniciar una acusación formal.
Inicialmente, los fiscales encargados del caso, ofrecieron a
Ardolf un acuerdo de dos años de prisión, que él
rechazó. Posteriormente, las pruebas se fueron acumulando,
y fue acusado de más cargos, aumentando así la pena impuesta.
Parece ser que el FBI encontró pruebas de que no era la
primera vez que cometía un delito de esta naturaleza, dado
que con anterioridad, había atacado de una forma similar a la
familia Brooklyn Park, por aparcar sus coches en frente de su
casa.
El pasado diciembre, el hacker se declaró
culpable de los cargos de robo de identidad, posesión y
distribución de pornografía infantil, acceso no autorizado a un
ordenador protegido, y amenazas al Presidente y sucesores a la
presidencia de Estados Unidos.
Barry Ardolf ha sido condenado hace dos días a 18 años
de prisión. Según palabras del abogado Timothy Rank
"Barry Ardolf ha demostrado mediante su comportamiento que
es un hombre peligroso". "Al enfadarse con sus vecinos,
expulsó su ira en una extraña y calculada campaña de terror contra
ellos" finalizó.
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